ISIDORO CARMONA

ISIDORO CARMONA, guitarrista profesional, más conocido en el mundo del arte de la guitarra flamenca con su propio nombre artístico de ISIDORO CARMONA, nació en Granada en el año de 1951 y tristemente fallecido. En 1974, obtuvo el premio del concurso Nacional de Guitarra Flamenca de la Peña Loa Cernícalos de Jerez de la Frontera (Cádiz). Ofreció, en 1973, un recital en homenaje a Niño Ricardo, en la Escuela de Arquitectos Técnicos de Sevilla. Ingreso en la compañía de Mario Maya en 1983.

ESTOS DATOS SON DE LA REVISTA   (SEVILLA FLAMENCA)
En el arte flamenco, como en todas las demás artes, el reconocimiento a la obra del artista, es lo más difícil de conseguir. Durante la vida del creador, este soporta la indiferencia a su reconocimiento, por ser esta inferior a la felicidad relativa del mismo. No es este el caso de Isidoro Carmona. Tampoco es por casualidad este reconocimiento, pues su obra fue acumulada como el acordeón que su primo "El Apañao" le tocaba y que posiblemente le afino el oído: con un tono en el primer ciclo y otro en el segundo.

Isidoro Carmona ha dejado poco, pero la música que ha quedado es digna y merecedora de que el pueblo sevillano, el aficionado a la misma, la oiga como a él le hubiera gustado sin duda. Del mismo modo que grabó su primer disco, Aljarafe, título que le aconsejo el actual Catedrático y amigo Luis Ramírez Díaz, aficionado desde su juventud al arte flamenco, una nueva obra, esta póstuma, va a editarse gracias al equipo de la organización de La VI Bienal de Sevilla.

Esta obra resume todo lo aprendido y "con todo lo que se quedó" como él decía de Albeniz, en los últimos años, trabajando con ahínco y estudiando con cariño. La Suite Andaluza, trabajo hecho por él, adaptado a varios instrumentos, uno de ellos interpretado magistralmente por el Catedrático del Conservatorio de Música de Sevilla José María Redondo, haciendo bailar al "Chelo", difícil instrumento adaptable al flamenco, por motivos tradicionales, por Alegrías, Tangos, Granainas y Bulerias. Esta Suite Andaluza, es comparable a cualquier obra clásica de autor consagrado.

Otras sueltas, tales como Australia, compuesta para el compás de bulerías, Maestro Leo, por solea, como regalo entrañable a su maestro, junto con alguna pieza más, son las obras que este músico ha dejado para que el aficionado andaluz y también de otras comunidades españolas, sepan adentrarse un poco más en la cultura nuestra; la única que tenemos musicalmente.