ANTONIO DE HELLÍN
ANTONIO MORENO FERNÁNDEZ, guitarrista payo, más conocido en el mundo del arte de la guitarra con el nombre artístico de ANTONIO DE HELLÍN, nació en Hellín (Albacete) en el año de 1934, en el seno de una familia de artistas su abuelo y su padre, Juan Ramón Utrera, ya eran guitarristas, y en su casa se ha vivido el flamenco toda la vida. Empezó a tocar la bandurria con siete años y con ocho la guitarra, instrumento que domina a la perfección y que le ha dado grandes momentos de gloria.
Lamentos 
de una guitarra,
que el tocaor con sus dedos
le transmite sus penas,
un grito que se desgarra
entre sus cuerdas,
desahogando el llanto
que lleva dentro de su alma.
Sus notas suenan a tristeza y dolor
que el tocaor se lo calla,
para que nadie sepa
el dolor que le atormenta.
Su guitarra le acompaña
para aliviar sus penas,
las manos con sus cuerdas
las dos se abrazan,
en el silencio de la noche
o de la madrugada,
nadie sabe en que momento
se siente esa gran nostalgia.
Refiere que su padre enseñó a tocar a su hermano, Morenito de Hellín, con el que se vino a Alicante en 1950, y que fue el que le inició en la carrera profesional. Antonio de Hellín recuerda que el bar. Las Cuatro esquinas era el lugar en el que se reunían los flamencos y gente de fuera para cantar y tocar. Asegura que por entonces hacía pequeñas actuaciones con cantaores en Alicante y la provincia, hasta que en 1952, con mucha más experiencia y soltura con la guitarra, se marchó con su hermano a Madrid, donde empezó a actuar en salas como el Pasapoga, en la que debutó con la cantante de boleros Carmen de Veracruz, y continuó en las salas de fiesta Parrilla Alcázar y Alazán.
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                A partir de entonces inicia un periplo profesional que le ha 
llevado a actuar con los grandes del flamenco por España, Europa y América. 
Refiere con orgullo que ha actuado con Pepe Mairena, Antonio Molina, Pepe Pinto 
-marido de la Niña de los Peines-, Juanita Reina, Marifé de Triana, Antonio 
Gades y Rafael de Córdoba. Un elenco de artistas con los que ha compartido 
cartel y que le llena de satisfacción. Ahora, acompañado de su hijo Antón 
Moreno, con el que ha actuado en numerosas ocasiones, se le agolpan en la 
memoria los recuerdos y siente tristeza de dejar profesionalmente a una 
compañera que como la guitarra le ha dado infinidad de buenos momentos.
                
Una vida dedicada al flamenco
Antonio Moreno Fernández. Tras una larga 
vida como guitarrista flamenco, 
				
Antonio Moreno Fernández, de nombre artístico Antonio de Hellín, se despedía el 
jueves en la con catedral de San Nicolás de su carrera profesional con una 
magistral actuación acompañando a su hijo, el cantaor Antón Moreno, en el 
concierto sacro-flamenco que lleva por título Miserere. Interpretación a la 
guitarra que fue muy aplaudida por el público y que le hizo emocionarse porque 
deja atrás toda una vida dedicada al espectáculo flamenco que le ha llevado por 
todo el mundo. Una experiencia profesional intensa y vibrante, que ahora, a los 
74 años, recuerda con cierta nostalgia, y que ha compartido con su mujer, la 
bailaora Adela Fernández, con la que en 1970 formó la compañía Los Calós y con 
la que ha hecho giras llevando el arte flamenco por toda Europa y también por 
Japón. Antonio Moreno recuerda que nació en Hellín en 1934, en el seno de una 
familia de artistas -su abuelo y su padre, Juan Ramón Utrera, ya eran 
guitarristas-, y en su casa se ha vivido el flamenco toda la vida. Empezó a 
tocar la bandurria con siete años y con ocho la guitarra, instrumento que domina 
a la perfección y que le ha dado grandes momentos de gloria. Refiere que su 
padre enseñó a tocar a su hermano, Morenito de Hellín, con el que se vino a 
Alicante en 1950, y que fue el que le inició en la carrera profesional. Antonio 
de Hellín recuerda que el bar. Las Cuatro esquinas era el lugar en el que se 
reunían los flamencos y gente de fuera para cantar y tocar. Asegura que por 
entonces hacía pequeñas actuaciones con cantaores en Alicante y la provincia, 
hasta que en 1952, con mucha más experiencia y soltura con la guitarra, se 
marchó con su hermano a Madrid, donde empezó a actuar en salas como el Pasapoga, 
en la que debutó con la cantante de boleros Carmen de Veracruz, y continuó en 
las salas de fiesta Parrilla Alcázar y Alazán.  A partir de entonces inicia un 
periplo profesional que le ha llevado a actuar con los grandes del flamenco por 
España, Europa y América. Refiere con orgullo que ha actuado con Pepe Mairena, 
Antonio Molina, Pepe Pinto -marido de la Niña de los Peines-, Juanita Reina, 
Marifé de Triana, Antonio Gades y Rafael de Córdoba. Un elenco de artistas con 
los que ha compartido cartel y que le llena de satisfacción. Ahora, acompañado 
de su hijo Antón Moreno, con el que ha actuado en numerosas ocasiones, se le 
agolpan en la memoria los recuerdos y siente tristeza de dejar profesionalmente 
a una compañera que como la guitarra le ha dado infinidad de buenos momentos.
				
ALICANTE  23.02.08 - T. RAMÍREZ,  
Dentro de los actos previos a la Semana Santa, la Junta de 
Hermandades y Cofradías de Alicante invitó a Antón Moreno a escenificar su 
concierto sacro flamenco "Miserere" en la Concatedral de San Nicolás el pasado 
jueves 21 de febrero. En esta ocasión, el popular cantaor alicantino estuvo 
acompañado de un cuarteto de cuerdas, un cuadro flamenco (en el que figuraba 
Antonio de Hellín, padre del cantaor) y un coro de cuatro voces. Todos juntos 
interpretaron las distintas piezas que componen esta singular combinación de 
arte flamenco y música religiosa, creada por el alicantino inspirándose en la 
"Misa Pontificial" del compositor y organista italiano Lorenzo Perosi 
(1872-1956) y en el cante de ese maestro de la época dorada del flamenco que fue 
el gaditano Enrique El Mellizo (1848-1906). De ese modo, surgió una obra 
original que progresa entre la belleza mística del 'Kirie' o el 'Benedictus' 
litúrgicos, los cuales se van alternando con cantos flamencos de palos como las 
soleás, las peteneras o esas peculiares malagueñas. Por último, la velada del 
jueves contó con el valor sentimental añadido de suponer la retirada profesional 
del guitarrista Antonio de Hellín, padre del cantaor y supervisor estilístico 
del Miserere. Escuchemos, pues, a Antón Moreno y el grupo reunido para la 
ocasión interpretando una de las piezas más queridas por el público, esas 
alegrías del 'Gloria a Dios en el Cielo' y del 'Salmo 121. Cántico de los 
peregrinos'.
February 22, 2008 08:09 AM PST
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| datos de dichas fuentes anotadas en sus artículos correspondientes, poema de José Maria Ruiz Fuentes | 
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