ROCIÓ RODRÍGUEZ

ENTREVISTA A ROCIÓ RODRÍGUEZ

 «La danza oriental tiene mucha magia porque es puramente femenina»

BAILARINA DE DANZA ORIENTAL Y FLAMENCO ÁRABE

Atraída desde los 26 años por este arte milenario, la bailarina Rocío Rodríguez lucha por que la danza oriental se haga cada vez más visible en Almería

La almeriense Rocío Rodríguez lleva danzando toda la vida, y cuenta con más de 12 años de experiencia como docente y experta en disciplinas como flamenco árabe, danza neoandalusí y danza oriental, además de ejercer como maestra de danzas hawaianas, como el ori tahití y el hula. Investigadora incesante, ha hecho de la fusión su bandera. Ahora ofrece sus conocimientos a través de su web, 'rociodanza.es'.

Echando la vista atrás, ¿cuáles considera que han sido los grandes momentos en su carrera como bailarina?

Yo llevo bailando desde los cinco años, cuando empecé con el flamenco y el folklore andaluz, y no fue hasta los 26 años cuando descubrí la danza oriental, me enamoré de ella y comencé a trabajar de manera intensiva. Quizá, los momentos más importantes que puedo destacar como bailarina, pero también como maestra, han sido varios. Uno de ellos fue ser invitada por el Gobierno de Egipto a bailar en Alejandría en el 50 aniversario de la compañía de danza nacional egipcia, dirigida por Mahmud Reda, en 2008, donde bailé con otras bailarinas de Madrid en la compañía Al-Ándalus, cuya directora entonces era Nesma. Allí bailamos en el auditorio de la Biblioteca de Alejandría frente a un público egipcio; además, fue España el país que hizo los honores de representar el baile tradicional egipcio; a raíz de ahí, surgió la oportunidad de dar unos talleres de flamenco árabe en Cambridge; el pasado junio estuve en Egipto en una competición internacional, en la que tuve la suerte de llevarme un premio en la categoría de baile con orquesta; y finalmente, este fin de semana, 24 y 25 de septiembre, estaré, como profesora, en el Bellystars Festival de Tenerife.

Es especialista en flamenco árabe. ¿Cómo surgió el interés por esa fusión?

Soy experta en danza oriental egipcia, conozco todo su folklore, pero cuando la descubrí, desde el principio la quise fusionar con el flamenco, porque veía unas raíces comunes. Tuve la suerte de formarme con un profesor de flamenco, Candy Román, que era el primer bailarín de la compañía de Antonio Gades, y estuve trabajando con él más de seis años en flamenco, me ayudó mucho con la fusión y ahora me he especializado en esa rama.

¿Qué raíces comunes observa entre el flamenco y la danza árabe?

En primer lugar, tienen unas raíces musicales comunes, de las que yo me alimento, porque hacer una pieza de música solamente árabe introduciendo el flamenco no tiene mucho sentido, como tampoco lo tiene a la inversa, a una pieza de flamenco pura, si le metes un movimiento árabe puede rechinar, necesito que la música esté fusionada y, afortunadamente, antes de que me dedicara al flamenco árabe, ya había fusiones, como las de El Lebrijano y la Orquesta Andalusí, y ahora hay artistas actuales que hacen fusiones a nivel musical muy buenas, como el guitarrista de flamenco egipcio Ali Khattab, con temas espectaculares Precisamente bailé en el festival de Egipto con una de sus piezas.

¿Cuáles son sus proyectos para este curso?

Mi principal objetivo es continuar con la actividad de mi academia online, 'rociodanza.com', donde tengo cursos grabados con mucha información concentrada, donde la gente puede disponer de ella en cualquier momento si no tiene mucho tiempo, a su ritmo y a su aire. Hay cursos de todos los estilos y de todos los niveles: danza oriental, flamenco árabe, también de danza hawaiana, que, aunque no es mi especialidad, me encanta y tengo un grupo. También imparto cursos puntuales en algunas academias de Almería. Como novedad, haré clases online en directo sobre temas concretos, para un público más reducido.

Este verano organizó un evento de calado, el Almariyya Fest. ¿Qué proyección tiene?

Efectivamente, a finales del pasado mes de julio, organicé la tercera edición del Almariyya Fest, que es mi festival y que ha ido a más. Este año ha sido espectacular, ha venido incluso gente de fuera de España a bailar: de Bolivia, de Alemania, espectacular. Mi intención es continuar con este festival el año que viene y celebrar en julio de 2023 una nueva edición. Además, a lo largo del curso surgen oportunidades y eventos donde bailar. Llevo varios espectáculos con mis alumnas más avanzadas.

¿Qué espectáculos tiene en marcha en este momento?

Uno de los espectáculo más novedosos que llevamos es 'I wanna dance. Los ochenta', basado en los éxitos de los años ochenta, donde bailamos danza oriental. Lo hacemos con una cantante almeriense, Luz, con voz en directo. Ya lo estrenamos en enero en el Teatro Cervantes. También tengo espectáculos de fusión flamenco árabe con distintos formatos y de danza andalusí.

También ha publicado dos manuales sobre danza oriental y fusión, ¿qué le llevó a plasmar en papel sus conocimientos al respecto?

En mi familia, a todos nos gusta escribir, pero también es cierto que me acerqué al mundo de la danza oriental a través de un libro que me regalaron titulado 'La danza del vientre', de Dolphina. De ahí salió la idea de escribir este tipo de manuales, primero, para ayudarme a mí misma, al plasmar lo que teóricamente tenía en la cabeza, de conceptos, sobre todo en el tema de la fusión, y luego, para ayudar a las personas que quieren aprender más sobre esta disciplina. Tener las cosas por escrito ayuda muchísimo a entender mejor el movimiento, lo que estás haciendo, el origen de la cosas. Hay que leer también cuando se baila.

A pesar de tratarse de un baile tan femenino, ¿qué les diría a los hombres y mujeres de Almería para animarlos a bailar danza oriental?

A las mujeres, en general, les diría que si quieren sentirse mejor a nivel de salud, psicológico, con ellas mismas, con su sensualidad, con su vida en general, si quieren ser más felices, que bailen, el estilo que quieran. La danza oriental tiene mucha magia porque es puramente femenina, pero en realidad cualquier danza te va a llevar a la alegría, bailar es muy divertido. Y si no pueden ir a clases presenciales, aunque sea online, con diez minutos al día dedicados a bailar es suficiente. A los hombres, les diría que hay un apartado de la danza oriental que pueden bailar, folklore, que también podría enseñarlo a bailar perfectamente, solo hace falta que haya gente que quiera. Es muy gratificante, sobre todo, se puede bailar con bastón, con una energía muy masculina. Para niños también se puede hacer un grupo, a los que también les enseño folklore, bailes populares adaptados a ellos.

 

 

ANUSKA BENÍTEZ - Sábado, 24 septiembre 2022,

https://www.ideal.es/culturas/almeria/rocio-rodriguez-danza-20220924215746-nt.html

 

 

 

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