EL RERRE DE LOS PALACIOS
EDUARDO ARAHAL GÓMEZ, cantaor de flamenco payo, más conocido en este mundo del cante flamenco con el nombre artístico de EL RERRE DE LOS PALACIOS, nació en esta bella localidad marismeña de Los Palacios (Sevilla) el día 8 de agosto del año de 1920, en el número 25 del Barrio Nuevo. Murió en Dos Hermanas (Sevilla), el 24 de mayo de 2003. Sus padres eran “de campo” y en “Los Cuatro Pinos” tenían unas tierrecillas donde la familia Arahal Gómez vivía. Una familia que se cargó de hijos, cuatro varones y cuatro hembras, un total de ocho bocas que tapar y un solo hombre trabajando: su padre. Así que los hijos varones y mayores pronto tendrían que dejar la escuela para trabajar en el campo. Su padre compró una “piara” de cabras y puso de cabreros a Francisco (cinco años mayor que Eduardo) y a éste. Eran años de necesidades, de hambre y de carencias… Eduardo, muy niño aún, canturreaba detrás de las cabras, en los espacios abiertos de una marisma inmensa y solitaria. Pero su cante gustaba a otros jornaleros quemados por los solanos ardientes por lo que pronto percibió cómo ese cante era una especie de bálsamo redentor para unos hombres que se tostaban bajo un sol inmisericorde. Y así, pegado a la tierra, es como comienza Eduardo Arahal a perfilar su personalidad cantaora.
El
Rerre de los Palacios,
Ha sido siempre muy querido,
Por su forma de decir el cante,
Con dulzura y mucho arte,
Como un buen aficionao
Admiro su cante y el saber,
Para
poder siempre tenerlo
presente en todos los cantes,
por su grandeza y sencillez
Fue uno de los cantaores
En España de los más grandes.
A Eduardo el cante le venía en los genes. Su abuelo materno, Antonio Gómez Cabezas fue un gran cantaor lugareño aunque nunca quiso ser profesional. Un hijo suyo, tío por tanto de nuestro hombre, sí quiso serlo aunque no lo dejó la familia, por lo que “perdió la cabeza” y con treinta y pocos años murió con síntomas de locura. Se llamaba Antonio Gómez Baquero y un día, arando en Los Villares, un cortijo muy cercano a la carretera general y en el que su padre era el manigero, Antonio cantaba malagueñas de Chacón con una voz preciosa, a esto que acierta a pasar en coche de caballos camino de Sevilla nada menos que el mismísimo D. Antonio Chacón quién se detuvo a escucharlo proponiéndole que se fuera con él a Madrid, pero su padre no se lo permitió y ello le produjo una gran decepción…
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Y en el campo, detrás de las cabras empezó el camino profesional de Eduardo. Pronto hallaría en la guitarra de Manuel Carmona el complemento ideal para ir definiendo sus cantes que él alternaba con su trabajo en el campo. Y llegó la guerra incivil y con ella otro tiempo de penurias y sufrimientos. Con 18 años es requerido por el gobierno franquista para alistarse en el ejército. Sevilla, Ceuta y el Protectorado español de Marruecos, donde estuvo tres años y medio, y luego Huelva. Un total de siete años de mili. Eduardo con mucho ángel nos confesaba: “Vamos, que Franco tuvo la delicadeza de tenerme siete años como soldado. ¡Anda que si no se muere todavía estoy vestido de caqui...!" (...)
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Realiza grabaciones muy importantes de las cuales se hace
bastante famoso en el sector de toda la afición de la mejor época del cante, muy
conocido por todas las emisoras de Radios, que solían poner sus discos, por el
buen decir del cante. Su cante a mi particularmente me gustaba mucho, por lo que
pude hacerme de uno de sus LP, un disco microsurco y de una cinta casete de su
buen repertorio, era acompañado por el Niño Ricardo en mucha de sus grabaciones,
como también en muchas de sus giras por la geografía española. Ha actuado en muy
buenas compañía acompañado con todos los mejores cantaores de sus mejores
tiempos,
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El
cantaor local Rerre de Los Palacios recibirá hoy un homenaje póstumo en el marco
del Festival de la Mistela
SEVILLA (LOS PALACIOS Y VILLAFRANCA)- El Ayuntamiento de Los Palacios y
Villafranca rendirá hoy un homenaje póstumo al cantaor local Eduardo Arahal
Gómez, Rerre de Los Palacios, con el descubrimiento de una placa en su memoria
en la glorieta de la calle las Postas, una zona próxima a la casa donde nació en
1920. El acto, que se celebra en el marco del Festival de la Mistela, tendrá
lugar a las 20.00 horas. Lo presidirá el alcalde Antonio Maestre, que descubrirá
el monolito junto a un familiar del artista. Antes, el periodista de ABC y
crítico de flamenco, Alberto García Reyes, ofrecerá una semblanza de Rerre de
Los Palacios, con quien tuvo una estrecha relación en los últimos años de su
vida. El concejal Manuel Curao, también periodista, flamencólogo y coordinador
del festival, dará la bienvenida a los asistentes y presentará el homenaje, que
concluirá con la emisión de un documental elaborado por la Televisión Local en
el que se recogen pasajes de una de las últimas entrevistas realizadas al
cantaor. El regidor palaciego ha recordado que el Ayuntamiento ya reconoció a
Rerre de Los Palacios en 2000, al cumplir 80 años, con el primer Escudo de Oro
de la Villa, pero “teníamos pendiente un homenaje público y abierto a los
vecinos en el que quedará constancia de su valía artística y de la importancia
de su legado, al tiempo que acercamos su figura a las generaciones más jóvenes”.
Maestre ha destacado que “Eduardo Arahal llevó el nombre de Los Palacios por
toda España en más de 50 años de vida artística, en los que actuó con las
primeras figuras del flamenco” Aunque vivió muchos años en la vecina localidad
de Dos Hermanas, donde falleció el 24 de mayo de 2003, Rerre de Los Palacios
siempre estuvo vinculado a su localidad natal. Siempre había cantado, pero su
apogeo le llegó en los años 1950 y 1960. Ha grabado siete discos, con casi 30
canciones. El primero de ellos en 1958, con Triguito. En 1965 graba su primer
disco de saeta, palo que cantó como nadie, según los expertos. Le seguiría en
1967 la Misa Flamenca, con Rodríguez Buzón. En 1980 volvería a la saeta. Rerre
de Los Palacios se codeó y compartió escenarios con los más grandes cantaores de
su época, como Juanito Valderrama, La Niña de la Puebla o Niño Marchena,
actuando en las grandes óperas flamencas. En cuanto a las actuaciones del
Festival de la Mistela, esta noche es el turno de la Compañía de Baile La Moneta,
que presenta su espectáculo “De entre la luna y los hombres”, estrenada en el
Festival Málaga en Flamenco. Mañana jueves, tras el homenaje a Rerre de Los
Palacios, ofrecerá un concierto Miguel Poveda, con la colaboración de Juan
Carlos Romero. Este cantaor catalán, considerado una de las grandes figuras del
cante actual, es Premio Nacional de Música 2007 en la modalidad de
Interpretación, tras triunfar definitivamente en 2006 con su disco “Tierra de
calma”. También desde mañana habrá Trasnoches Flamencos en la sede de la
Tertulia Cultural Flamenca el Pozo de las Penas. Lo abren Rocío Bazán al cante y
Pedro Javier Jimeno al toque. El viernes intervendrán Manuel Machuca y Ricardo
Miño y cierra el sábado 7 el baile de Pastora Galván, con Jeromo Segura al cante
y Juan Campallo al toque.
Jueves, 5 de Junio de 2008. SEVILLA
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Historia
Local
El nuestro es un pueblo resultado de la fusión de dos villas
vecinas: Los Palacios y Villafranca de la Marisma. La primera de ellas tiene su
origen en unos palaciegos que, sobre un antiguo castillo árabe , se hizo
construir Pedro I de Castilla, gran aficionado a la caza que tanto abundaba en
nuestras marismas, a mediados del siglo XIV. En 1.371 Enrique II, hermano de
Pedro I, hizo donación del lugar a Fernán González de Medina, Alcaide de los
Reales Alcázares y Atarazanas de Sevilla, con licencia para que pudiera hacer en
él población de cincuenta vecinos, danto así lugar al primer núcleo poblacional.
La segunda procede de un antiguo poblado árabe que respondía al nombre de Anevel
y que, cuando estas tierras pasan a manos castellanas, es llamado unas veces Las
Chozas, que no es más que la traducción a nuestra lengua de su primitivo nombre,
otras Marismas en razón de su situación geográfica. Este poblado y sus tierras
tienen como primer dueño a la Iglesia de Sevilla, a la que hace merced de ello
Alfonso X el Sabio en el año 1.277. Por unas disputas sobre las rentas, vuelve a
manos de la Casa Real y Alfonso XI hace donación del lugar a su Camarero Mayor
Diego López de Arnedo, con autorización para que se establezcan en él diez
pobladores excusados de toda suerte de tributos. Al no cumplirse las
expectativas deseadas sobre la población del lugar, éste revierte de nuevo a
manos de la Corona y ,desde entonces depende de la jurisdicción de la ciudad de
Sevilla. Sobre el año 1.400 compra la Casa de Arcos la hereded de Los Palacios,
que desde entonces se convierte en un señorío de esta Casa Ducal. Sobre el año
1.500 se promulga la Carta de Poblamiento por la que la otra aldea pasa a
llamarse Villafranca de la Marisma, debido a la franqueza que se concede a
quienes se establezcan en ella como colonos. A partir de entonces, los dos
pueblos viven unas relaciones de vecindad marcadas por sus diferentes caracteres
jurisdiccionales: Los Palacios señorío de la Casa de Arcos y Villafranca de la
Marisma lugar de realengo. El hecho histórico más trascendente de la historia de
nuestro lugar es la Carta-Privilegio otorgada por Su Majestad Felipe IV a
Villafranca de la Marisma, en el año 1.644, por la que le concede el título de
villa de por sí y en sí, con jurisdicción civil y criminal propia, separándola
de la jurisdicción de la ciudad de Sevilla. Desde entonces, los dos pueblos van
creciendo el uno junto al otro, separados sus términos por el cauce de un
pequeño arroyo, el Arroyo de la Raya, que discurría por lo que hoy es la Plaza
de España y cuyas aguas salvaba un puente de piedra con una gran cruz, también
de piedra, que marcaba el límite entre los dos términos y que unía la calle Real
de Villafranca con la calle Real de Los Palacios. Cuando en la primera mitad del
siglo XIX las Cortes de Cádiz abolieron el régimen señorial en España, dejó Los
Palacios de estar bajo la tutela de la Casa de Arcos y los vecinos de ambas
villas comprendieron que dos lugares tan cercanos que se confundían en sus
términos no debían seguir separados por más tiempo, y así, en el año 1.836,
ambos acordaron la unión en un abrazo eterno de hermandad, con el que dieron
paso a la formación del que actualmente es nuestro pueblo: Los Palacios y
Villafranca. Resulta un hecho curioso que, aunque durante siglos constituyeron
dos poblaciones diferentes en lo civil, en lo religioso siempre compartieron una
iglesia parroquial que fue común para los dos pueblos: la iglesia parroquial de
Santa María La Blanca. Precisamente sirvió esta iglesia parroquial el más
universal de los personajes de nuestra historia: el Bachiller Andrés Bernáldez,
cronista del reinado de los Reyes Católicos conocido en el mundo de las letras
como El Cura de Los Palacios, del que se sabe fue confesor de la Reina Isabel y
amigo personal de Colón, a quien tuvo como huésped en su casa durante varios
días al regreso de su segundo viaje al Nuevo Mundo. Otros personajes ilustres de
nuestro pasado son: Juan Páez Hurtado, nacido en Villafranca de la Marisma en el
año 1.668, militar que es considerado el artífice de la conquista de Nuevo
México. Juan Ramos de Lora, nacido en Los Palacios en el año 1.722, misionero
franciscano, primer Obispo de Mérida de Marabaibo ( Venezuela ) y fundador de la
Universidad de los Andes, la primera universidad de aquel país andino. Felipe
Cortines Murube, nacido en Los Palacios en el año 1.883, poeta. Joaquín Romero
Murube, nacido en Los Palacios en el año 1.904, poeta de nuestro pueblo y de
Sevilla. Pedro Pérez Fernández, aunque nacido en Sevilla, llegó a Los Palacios
cuando apenas tenía diez años, autor de numerosas comedias durante la primera
mitad de nuestro siglo.
Antonio Cruzado González. Cronista e historiador de Los Palacios y
Villafranca
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