MENÚ PRINCIPAL |
Inicio |
Presentación |
Cantaores |
Guitarristas |
Bailaores/as |
Estilos del cante |
Canción Española |
Datos Flamencos |
Dedicatorias |
Entrevistas |
Historias |
Homenajes |
Poesías |
Recitales |
Recordando Cantaores |
Tertulia Flamenca |
Noticias |
PROGRAMAS DE RADIO |
Arte y Compás |
Escuela del Cante Flam. |
Programa Cadena SER |
Programa de radio |
AUDIOVISUALES |
El saber del Cante |
Fotografías |
Galerías |
Títulos |
Videos |
CONTACTOS |
Libro de visitas |
Notas |
Tablero de Anuncios |
Contacto |
Links |
ACCESOS DIRECTOS |
LAMPARILLA - BAILAORES/AS |
Listado de cantaores por orden alfabético |
A B C D E F G H I J K L M N Ñ O P Q R S T U V W X Y Z | ||
LAMPARILLA
ANTONIO PAEZ CÓRDOBA, bailaor gitano, el célebre y malogrado bailaor más conocido en el mundo del arte del baile con el nombre artístico de LAMPARILLA, nació en Sevilla el día 26 de noviembre del año 1869, y murió de tuberculosis pulmonar en 1888, con sólo 18 años de edad y cuando prometía ser uno de los puntales del baile sevillano, nació el fenómeno en el número 4 de la calle Alcalá de Sevilla, que desde 1898 se llama Divina Pastora, una calle muy flamenca en la que murió el Niño Gloria en 1954 y donde vivieron muchos años algunas hijas de Manuel Torre y el gran bailaor de Morón Pepe Ríos, casado con una de ellas. Lamparilla nació, pues, en una de las zonas más flamencas de Sevilla, el Barrio de la Feria, donde vinieron también al mundo Manolo Escacena y Amalia Molina ambos en la calle Pedro Miguel, entre otros artistas importantes de lo jondo, de los que me ocuparé en breve. Lamparilla se bautizó también en Omnium Sanctorum y fueron sus padrinos el Maestro Pérez y su esposa, la sevillana Amparo León. Naturalmente, como el niño creció viendo bailar a su padre y tocar la guitarra, cantar y bailar a su célebre padrino, despuntó pronto y con sólo 7 años de edad ya hacía las delicias de sus vecinos en la Velada de San Juan de la Palma y en las de barrios colindantes.
|
|
Tan brillante era su baile, que en 1885 ya fue contratado para actuar en el
famoso Café del Burrero, en la sucursal de verano que hubo a la entrada del
Puente de Triana, compartiendo cartel con su padre, su padrino, El Canario de
Álora y el Canario Chico, Concepción Peñaranda La Cartagenera, La Carbonera, La
Escribana, La Bocanegra, la Rubia de Cádiz, Carito de Jerez, La Serrana y La
Sordita, Juana Antúnez, Palma Monje. Según Fernando el de Triana, el malogrado
bailaor Lamparilla fue un verdadero fenómeno. Comparándolo con su padre, el
célebre Antonio el Pintor, dijo que era “harina de otro costal, como lo
demuestra la sublime posición de baile que acusa su fotografía, fiel
demostración del más exquisito arte”, dijo el cantaor. En mi libro sobre El
Canario (El Cartel maldito, 2009) aporté ya algunos datos inéditos sobre el
célebre bailaor sevillano.
|
|
Entre otros, los precisos para demostrar que era en realidad sevillano, como su
padre, al que alguna vez habían hecho de Cádiz. Pues no era de Cádiz El Pintor,
sino natural de Sevilla, donde vino al mundo el día 30 de abril de 1845. Nada
menos que en el número 22 de la Plaza de San Juan y bautizado en San Juan de la
Palma. Hijo de un zapatero remendón, Francisco Páez, y de María de la Salud
Castro, dedicada a sus labores, sus abuelos paternos, Antonio y María Antonia,
eran de Estepa y Umbrete, respectivamente, dos localidades sevillanas. Los
maternos, José y María de la Salud, eran sevillanos de pura cepa. Tuvo varios
hermanos (Eduardo y María Dolores, que eran mellizos; Concepción, Manuel y
María), pero, que sepamos, al arte del flamenco sólo se dedicó Antonio. Desde
muy jovencito, además, como puede comprobarse en la prensa sevillana de la
época. Con poco más de veinte años de edad se unió a la sevillana Carmen Córdoba
Barrera, que había nacido en el número 9 de la calle Linos de Sevilla, el día 27
de junio de 1846. Hija de un cordobés de Espejo, Francisco Córdoba, y de la
sevillana Isabel Barrera, se bautizó en la Parroquia de Omnium Sanctorum. Esta
mujer fue la que trajo al mundo a Antonio Páez Córdoba, el célebre y malogrado
bailaor Lamparilla, el 26 de noviembre del año 1869.
|
|
Este cartel ya se publicó en la citada biografía sobre El Canario. Pero antes de
actuar en el café donde mataron al célebre malagueñero de Álora, Lamparilla
formó parte de un cuadro, de los primeros que actuaron en la capital de España,
compartiendo protagonismo con Dolores la Pitraca, La Pipote, que era hermana de
La Paloma; Rosario la Honrá, Josefa la Pitraca, Paco Cortés y el guitarrista
Bautista. Nunca vamos a saber el arte que tenía Lamparilla, pero tuvo que ser
muy bueno cuando se codeaba con estas figuras de la época siendo sólo un
chiquillo. La fama le llegó muy pronto y con ella, claro está, algunos
problemas. Fernando el de Triana insinuó que lo mató el baile. Lo cierto es que
murió de tuberculosis pulmonar en 1888, con sólo 18 años de edad y cuando
prometía ser uno de los puntales del baile sevillano. Murió en la Plaza de la
Europa, 4, en la Alameda de Hércules, donde vivió algunos años. En su partida de
defunción consta que era “Profesor de baile”. Todo un profesional del arte
flamenco. Antonio el Pintor y su esposa tuvieron que pasar por el duro trance de
ver morir a todos sus hijos, unos más pequeños que otros. Lamparilla les duró 18
años. Cuando murió el fenómeno se quedaron solos en la vida, solos y con el
recuerdo de aquel hijo que movía los brazos como nadie lo había hecho en el
baile. En otra ocasión daré a conocer otros importantes documentos. Con estos
datos, que se aportan por primera vez, espero conseguir que de ahora en adelante
cada vez que se escriba o se hable sobre el célebre Lamparilla, el hijo de
Antonio el Pintor, se diga que fue un sevillano de la calle Divina Pastora, de
pura cepa, que vivió para el baile y murió por él atrapado en un ambiente
peligroso. Era totalmente injusto que no conociéramos todavía sus datos
personales.
VIDEO |
|
Enlace http://blogs.elcorreoweb.es/lagazapera/2011/04/25/luz-para-el-malogrado-lamparilla/ + recopilación José María Ruiz Fuentes |
El Arte de Vivir el Flamenco © 2003 |